domingo, 21 de septiembre de 2008

POR EL PAPEL

DOS TOROS AL ATAQUE

El Torito volvió a ganar con goles de Pablo Vázquez y Gigena, los dos tanques que tiene arriba. Con el 2-0 al Canario, sumó el segundo triunfo al hilo y se prendió.






GIGENA Y VÁZQU
EZ LE HABÍAN MARCADO LA FECHA ANTERIOR A TEMPERLEY Y REPITIERON EN LA VISITA DE AYER A JÁUREGUI.

La imagen se repite, felizmente para la gente de Chicago. Va Pablo Vázquez y la mete. Va Darío Gigena y también. Una semana atrás ante Temperley en Mataderos y ayer con Flandria en Jáuregui, para sumar el segundo triunfo consecutivo y empezar a arrimarse al pelotón que marcha arriba en la tabla.

A diferencia de lo que pasó el sábado pasado, esta vez Chicago arrancó el partido enchufado y no necesitó esperar al segundo tiempo para despertarse. Manejó la pelota y presionó en campo de Flandria y aunque no llegó con claridad al arco rival, Gigena y Vázquez, las dos torres que tiene en el ataque, la aguantaban y complicaban a la defensa del Canario. Y así llegó el primer gol. Después de que Gigena dejara pasar una chance con un derechazo que pegó en la parte externa de la red, Cigno hizo un lateral rápido, Vázquez aguantó en el área de espalda, giró, le pegó fuerte al primer palo y anotó el 1-0.

Flandria, en el debut del Loco Santorelli como DT, no inquietó nunca. Es cierto que en el segundo tiempo se adelantó y Risso pasó a jugar de enganche para complicar al fondo del Torito, pero el cambio no llegó a funcionar y su equipo no logró tomar vuelo. Estuvo lejos del que una fecha atrás logró el primer triunfo de la temporada ante Almirante.

Ante la imposibilidad de su rival, Chicago esperaba con orden y bien parado, siempre en su propio campo. Hasta que Vázquez volvió a aguantar la pelota, se la dio a Gigena y éste se llevó a la rastra a Delgado y Quinteros, eludió al arquero Fernández y definió con un bombazo. Otra vez 2-0, otra vez dos goles de los torazos que tienen los de Mataderos en el ataque.

Si bien De Olivera fue exigido sobre el final por De Forti, no hubo mucho más para Flandria. Los dos delanteros que tiene Chicago, que sobresalen en la Primera B por su categoría y experiencia, fueron demasiado para la buena voluntad del Canario. Ahora que se arrimó, el Torito debe empezar a confirmar que puede pelear arriba para mantener encendida su ilusión de volver.

Fuente:ole